Ayer domingo, 10 de abril, tuvimos una agradable excursión que transcurrió según lo previsto y con una puntualidad británica. Llegamos a Burgos a las 10:45, con tiempo para alguna visita libre: casi todos nos fuimos a visitar la exposición de El Greco en la Catedral, donde nos encontramos con una pintura inusual en la trayectoria de este pintor (el martirio de San Sebastián), una pintura con tonos claros y sin esas características figuras alargadas. Seguro que para muchos era la primera vez que veíamos a un Doménikos Theotokópoulos de tintes tan claros, siempre oscuros y figuras alargadas...
A las 13:00 h estábamos todos ya en el vestíbulo del Museo de la Evolucion Humana: arquitectura en forma de prisma, muy espaciosa y con una claridad magnifica. Se nota que han trabajado con esmero en el montaje de lo allí expuesto. Un lugar muy apropiado para albergar los hallazgos de Atapuerca. Contemplamos al Homo antecesor y otros... ¡qué feos!
Almorzamos a la 15:00 h.en el restaurante del hotel Fernán González: una paellita castellana, que también las tenemos, y picantones de la comarca.
Terminando de comer, nos dirigimos al Yacimiento de Atapuerca acompañados de Isabel, una simpática licenciada en historia que nos explicó los detalles y el proceso de investigación en los tramos de la gran Dolina, el Elefante, los osos y en la sierra del mismo nombre, donde pudimos comprobar el lugar en el que hace millones de años la vida transcurría con menos prisas. Es una pena que no muestren al público La Galeria de Sílex, ni La Cueva mayor...
Eran las 19:30 horas cuando regresamos felizmente a Valladolid, con un grato recuerdo de la jornada y una idea que lo resume todo: buen ambiente, vecinos excelentes y una junta directiva de Asoveco que cumplió con creces (es por si no nos lo dicen nuestras abuelas...).
¡Gracias a todos y hasta la próxima excursión!
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